Nos encantan las velas, su aroma, el misterio que esconden…pero queríamos ser fieles a nuestro espíritu ecológico y buscamos un material “eco”. La respuesta la encontramos en la cera de soja,  de origen vegetal que reúne ventajas:  no desprende humo negro al arder porque no deriva del petróleo, proporciona un suave aroma a aceite esencial, incluso cuando está apagada, su bajo punto de fusión permite que se consuma la cera lenta y completamente por lo que dura el doble que una vela de parafina y lo hace sin dejar restos en el recipiente, listo para ser reutilizado.

Muchos pros y un único inconveniente  ya que la cera de soja necesita un contenedor porque al arder se licúa. Two bee-z ha visto otra oportunidad de reciclar latas o envases de cristal  que decoramos; o también recipientes nuevos, como el modelo León , que puede ser reutilizado para velas de té o para tomar una sopa…